Preguntas a expertos
¿Será que mi hijo consume drogas?
Experto clínico: Dr. Alan Ravitz, MS
in English¿Cómo puedo saber si mi hijo adolescente consume alcohol y drogas recreativas o abusa de los medicamentos recetados?
Aunque todos nos sentiríamos más cómodos si los adolescentes se abstuvieran del consumo de alcohol, marihuana y otras drogas recreativas (todas ellas ilícitas para los menores), los padres realistas saben que la mayoría de los niños tendrán contacto con ellas, y muchos las consumirán. Entonces, ¿cómo sabemos identificar el momento en que los niños están entrando en un territorio peligroso del que resulta muy difícil regresar?
Algunas drogas deberían ser motivo de preocupación inmediata: la heroína, los analgésicos opiáceos, la cocaína y la metanfetamina. En el caso del alcohol y la mariguana, que en algunas high schools son omnipresentes, los signos de que un niño puede estar desarrollando un problema grave incluyen los siguientes:
Su hijo se intoxica con frecuencia, consume sustancias antes o durante las clases, o esconde alcohol o drogas en su habitación.
Ha faltado a la escuela con frecuencia o su rendimiento escolar ha empeorado.
Ha cambiado de amigos o ha abandonado actividades y cosas que antes le interesaban.
Ha mostrado conductas peligrosas, como pelearse o manejar en estado de ebriedad.
Ha desarrollado una tolerancia a la sustancia de su preferencia, y por ello tiene que tomar mayores cantidades para obtener el efecto deseado.
Muestra síntomas de síndrome de abstinencia si no está bebiendo o consumiendo drogas.
Ha intentado y no ha conseguido reducir o controlar su consumo de drogas o alcohol.
Tiene un trastorno psiquiátrico que podría verse agravado por el consumo de sustancias: los estimulantes pueden inducir episodios maníacos, y la marihuana, el alcohol y los opiáceos pueden provocar depresión en niños que ya son vulnerables.
Está tomando medicación para otro trastorno psiquiátrico. El consumo de drogas o alcohol interferirá con su eficacia, ya que el medicamento y la dosis han sido calculados para un cerebro típico, no uno que haya sido alterado por otras sustancias.