Los niños con mutismo selectivo (MS) pueden tener habilidades de socialización y lenguaje completamente normales e interactuar de forma típica cuando están en casa y en un lugar cómodo. Pero los niños con autismo tienen los mismos retos sociales estén donde estén.
Preguntas a expertos
¿Cómo se puede diferenciar el síndrome de Asperger del mutismo selectivo?
Clinical Expert: Dr. Steven Dickstein
in English¿Me podría dar información acerca de cómo diferenciar entre el síndrome de Asperger y el mutismo selectivo? Creo que un niño al que le doy servicios del habla y del lenguaje lo diagnosticaron incorrectamente.
Frecuentemente, a los niños quienes son dolorosamente tímidos y reacios al hablar se les diagnostica de manera incorrecta, especialmente cuando solamente se les observa en su escuela o en la oficina de un clínico. Los niños con mutismo selectivo os SM (MS, por sus siglas en inglés) pueden tener las habilidades de socialización y lenguaje completamente desarrolladas para su edad, e interactúan típicamente cuando están en casa o en un lugar donde se sientan cómodos. Y aun cuando estén en una situación o un entorno en el cual no hablen, pueden interactuar de manera normal y comunicarse a través de las señales no verbales. (Algunos niños con MS también están petrificados con ansiedad y tampoco se comunican con señas no verbales).
Algunos de ellos pueden hablar con otros niños, pero se paralizan completamente al hablar con los adultos. A menudo, su comportamiento se confunde por voluntad, pero lo que están experimentando es una incapacidad para hablar, incluso si están sufriendo y con necesidad de ayuda. La clave es que esta inhabilidad es “selectiva” en ciertas partes de su vida y proviene de la ansiedad. En cambio, los niños con síndrome de Asperger son quienes son en cualquier entorno que estén, y la manera en la que interactúan con el mundo social siempre es inusual. Sus dificultades sociales están “generalizadas”. A veces, pueden interactuar mejor con los niños más pequeños que ellos, ya que los pequeños normalmente se adaptan a sus comportamientos, y a veces se llevan bien con los adultos porque se pueden adaptar a ellos. Pero, con los compañeros de su propia edad, los niños con síndrome de Asperger pueden tener más dificultades con la navegación social que se les da de manera natural a los otros niños. Ahí es donde estos niños se meten en problemas, ya que les cuesta mucho trabajo entender y jugar con sus compañeros. Así que los niños con Aspergers no entienden muy bien las sutilezas y los límites de las conversaciones, mientras que los niños con MS van a estar socialmente y emocionalmente comprometidos y, aunque no puedan hablar, pueden entender las señales no verbales.
Por otro lado, los niños con Aspergers se resisten a los cambios de rutina y responden a estos con berrinches o crisis, mientras que los niños con mutismo selectivo internalizan sus emociones, sus miedos y sus necesidades. El factor definitivo para distinguir entre estos dos es la presencia o ausencia de las aptitudes sociales y de la reciprocidad emocional. Se debería notar que, aunque los niños con Aspergers normalmente no tienen ningún déficit del habla y pueden ser muy parlanchines, hay muchos en el rango del autismo que de hecho sí tienen dificultades al comunicarse verbalmente, y esta es la razón por la cual los nuevos criterios de diagnóstico van a reiterar los déficits de comunicación y los intereses restringidos.
Preguntas frecuentes
Los niños autistas tienen dificultades sociales generalizadas. Les cuesta relacionarse o jugar con sus pares. Los niños con mutismo no pueden hablar en determinadas situaciones, como en la escuela o con adultos. Pero su mutismo se produce por su ansiedad.
La clave está en la palabra “selectivo”, lo que significa que sólo aplica a determinadas partes de la vida de los niños, y en que su origen es la ansiedad. En cambio, los niños con Asperger se comportan de la misma manera estén donde estén y su forma de relacionarse con el mundo social es siempre inusual.