Lo mejor que pueden hacer padres y madres para ayudar a sus hijos a aceptar el divorcio es decirles que está bien expresar cualquier emoción que estén sintiendo. En lugar de tratar de “animarlos”, escucha cómo se sienten, aunque lo que digan sea incómodo para ti. Luego di algo como: “Entiendo por qué te sientes así. ¿Quieres contarme algo más?”.
Cómo apoyar a los niños durante un divorcio
Desde cómo poner atención a lo que sienten, hasta cómo responder a la ansiedad, al comportamiento disruptivo y más.
Expertos clínicos: Stephanie Samar, PsyD , Jamie M. Howard, PhD
in EnglishLo que aprenderá
- ¿Cuáles son las reacciones normales de los niños ante el divorcio?
- ¿Qué pueden hacer los padres para facilitar la transición?
- ¿Cómo pueden colaborar entre sí los padres divorciados para ayudar a sus hijos?
Lectura rápida
Cuando los padres se divorcian, una de sus tareas más importantes es asegurarse de que los niños estén bien. Los niños reaccionan al divorcio de diferentes maneras. Pueden sentir que han hecho algo para provocar el divorcio. Pueden sentir ansiedad. Pueden retraerse o portarse mal. Todas estas son reacciones totalmente normales.
Lo mejor que pueden hacer los padres es hacerles saber a sus hijos que cualquier emoción que tengan está bien. Tratar de levantarles el ánimo solo los presiona para que se sientan de una manera que no corresponde con cómo se sienten en realidad. En su lugar, intenta escuchar cómo se sienten, incluso si esto te causa incomodidad. En lugar de tratar de ” arreglar” su problema, podrías decir algo como: “Entiendo por qué te sientes así. ¿Quieres contarme más?”. Esto hace que el niño sienta que puede hablar contigo sin preocuparse de hacerte sentir mal.
Una rutina estructurada ayuda a los niños con ansiedad. También ayuda a prevenir problemas de comportamiento y a que los niños mantengan su concentración en la escuela. Es buena idea informar a los maestros acerca de lo que está ocurriendo. Algunos niños pueden necesitar atención adicional de parte de sus maestros. Si un niño parece estar evitando a sus amistades o la escuela, intenta dedicarle más tiempo. Si esto no ayuda, es una señal de que tu hijo podría estar experimentando depresión. Puede que necesite ayuda profesional.
Hay algunas reglas generales que los padres pueden seguir y que ayudarán a los niños durante el divorcio. Trata de mantener la calma lo más que te sea posible. Esto les dará seguridad a los niños. Diles que el divorcio no es su culpa. Haz lo posible por no decir nada malo de tu ex delante de los niños. Es importante que sepan que tú y tu ex están de acuerdo en cuanto a la crianza. Y, por supuesto, no puedes dar lo mejor de ti a tus hijos si no te cuidas tú también.
Una de las mayores prioridades durante un divorcio es asegurar que los niños continúen progresando y desarrollándose. Si bien es innegable que los divorcios son un desafío para los niños de todas las edades, la buena noticia es que hay mucho que los padres pueden hacer para asegurarse de que sus hijos se sientan apoyados durante el proceso.
Una vez que les han dicho a sus hijos que se divorciarán, es común que los niños pasen por un período de ajuste. Es probable que tú también estés pasando por un período de ajuste a medida que se reorganizan los lazos familiares y se establece una nueva “normalidad”.
Stephanie Samar, PsyD, psicóloga infantil en el Child Mind Institute, recomienda no alarmarse demasiado por algunas de las reacciones que podrías ver al comienzo de la transición. “Piensa en lo caótico que es para los adultos que están en la situación, quienes al menos tienen algo de control. “Ese período de adaptación tiene que suceder, así que respétalo y no empieces a enviar el mensaje de ‘sólo quiero que seas feliz’”, señala. No quieres presionar inadvertidamente a los niños para que sientan que necesitan estar de acuerdo y felices por el divorcio. Si bien puede ser cierto, por supuesto, que tú sólo deseas que tus hijos se sientan felices lo antes posible, darles espacio para procesar sus propios sentimientos es una parte importante de la adaptación.
Respeta sus emociones
Una manera de hacerles saber a los niños que está bien sentir molestia o enojo es alentarlos a compartir cómo se sienten. La Dra. Samar recomienda decir: “Nos gustaría saber cómo te sientes al respecto, y no vas a herir nuestros sentimientos si nos dices cómo te sientes”.
Esto puede ser más fácil de decir que de hacer, ya que lo que tu hijo tiene que decir puede ser difícil de escuchar, pero es importante darle la oportunidad de hablar con honestidad. Los niños a veces tratan de proteger a sus padres de la verdad acerca de cómo se sienten porque no quieren causarles molestias (o más molestias, si los niños ya se preocupan por uno de sus padres que parece infeliz con la ruptura). Pero no es el trabajo del niño hacer que el padre se sienta mejor, y tú no quieres enviar inadvertidamente el mensaje de que te sentirás triste si tu hijo se siente triste. Deja en claro que te interesa lo que tu hijo tiene que decir y, como dice la Dra. Samar, “ten cuidado de no permitir que eso lastime tus sentimientos. Obtén todo el apoyo que necesites para lidiar con cómo se sienten tanto tú como tu hijo, y cómo eso te afecta a ti”.
Como parte del respeto a las emociones de tu hijo, haz todo lo posible por escuchar y no intervenir. El instinto de cada padre es saltar y proteger a su hijo de cosas que son dolorosas, pero el divorcio es inevitablemente doloroso. Dar un paso atrás y solamente escuchar le permite a tu hijo sentirse escuchado y sentir que su opinión es importante. También le hace saber que sus emociones no son un problema que resolver o “superar”. Esto requiere escuchar con atención y empatía, lo que los psicólogos llaman “validación”. Por ejemplo, si tu hija dice que está enojada, en lugar de inmediatamente buscar una manera de animarla, podrías validar esa emoción diciendo que entiendes por qué ella podría sentirse así y animarla a que te cuente más.
Qué esperar y cómo responder
Si bien es normal que los niños tengan un período de adaptación en el que podrían tener dificultades, hay cosas que puedes hacer para ayudar a tus hijos a sobrellevarlo de la manera más saludable posible. Estas son algunas preocupaciones o comportamientos comunes que los padres podrían ver, y cómo ayudar.
Culpa
Es común que los niños se preocupen de haber hecho algo que haya provocado que sus padres se divorcien, especialmente los niños más pequeños, señala Jamie Howard, PhD, psicóloga clínica del Child Mind Institute. “Los niños son más propensos a culparse a sí mismos cuando son más pequeños porque son muy egocéntricos”, dice la Dra. Howard. “Incluso si crees que lo entienden, esto es algo que querrás asegurarte de decirles de manera explícita: No es tu culpa”.
Ansiedad
El divorcio significa algunos cambios fundamentales en las rutinas, que pueden hacer que muchos niños sientan ansiedad. Si notas señales de ansiedad en tus hijos, una forma de ayudar es dejarles muy claro lo que pueden esperar. Por ejemplo, ¿cómo serán sus nuevos acuerdos en cuanto a la vivienda? En el caso de niños más pequeños, puede ser útil publicar un calendario en la pared para mostrarles dónde estarán cada día.
Los niños estarán tranquilos si puedes establecer una rutina constante, y como madre o padre debes hacer de eso una prioridad. “Vemos que los niños tienen más dificultades si sus padres tienen dificultades para descubrir cómo cocriar, y cómo se verá eso”, dice la Dra. Samar. “Entonces, cuanto antes puedas establecer la logística (‘estarás aquí por estos días y aquí por estos días’), y que esto sea consistente y predecible, verás a los niños acoplarse más rápido y tener menos dificultades”.
Problemas de comportamiento
Los niños también pueden comenzar a portarse mal con más frecuencia. Esto puede ser otra señal de ansiedad o puede ser por un deseo de descubrir cuáles son los nuevos límites. De cualquier manera, crear un ambiente estructurado con expectativas claras de comportamiento debería ayudar.
“Los niños podrían ver esto como una oportunidad para probar nuevos límites, y sin un entorno estructurado, su comportamiento podría empeorar. En la medida de lo posible, mantén las cosas estructuradas de la misma manera en ambos hogares”, aconseja la Dra. Howard.
Regresión
También es común que los niños respondan a un gran cambio en sus vidas necesitando más atención de parte de sus padres. “Algunos niños necesitarán más apoyo de los padres y los adultos con las cosas que solían hacer de forma independiente”, dice la Dra. Samar. “Es posible que su rutina de sueño se interrumpa, o que necesiten que hagas algunas cosas de cuidado personal por ellos, un poco más de lo que solías hacerlo antes”.
Distanciamiento
Los padres también pueden ver lo contrario: niños que se retraen más o que se vuelven más distantes. Si bien es importante darles a los niños su espacio, de todas formas querrás crear oportunidades para pasar tiempo con ellos, así que considera sugerir una salida especial que pueda ser particularmente atractiva u otras maneras de vincularse. Asegúrate también de hacer todo lo posible por estar disponible para hablar si tu hijo lo desea, y haz un buen trabajo escuchando lo que tu hijo tiene que decir cuando lo haga.
Si notas que tu hijo está perdiendo interés en actividades que solía disfrutar, o no quiere pasar tiempo con sus amistades, intenta hacer que retome esas cosas. Quieres ayudar a mantener una sensación de normalidad, y estas áreas de escape son importantes. Querer distanciarse también puede ser una señal de depresión, de un trastorno de adaptación o de rechazo escolar, los cuales están todos relacionados con el divorcio, por lo que es importante prestar atención si tu hijo continúa evitando las cosas.
Problemas para concentrarse
Algunos niños también pueden comenzar a experimentar dificultades para concentrarse en el trabajo escolar. La vida puede parecer muy caótica, así que haz tu mejor esfuerzo por crear rutinas predecibles y tranquilizadoras en casa, incluida una rutina regular para las tareas. También es una buena idea alertar a los maestros de la situación que están atravesando como familia, para que tu hijo pueda obtener apoyo adicional en la escuela si lo necesita.
Buenos consejos de crianza durante un divorcio
Modela la calma: En la medida de lo posible, querrás mostrar una actitud de “lo tenemos todo bajo control”, dice la Dra. Howard. “Incluso si no es cierto, incluso si solamente uno de los padres se siente así. Particularmente si tienes niños pequeños, te tienes que asegurar de que funcione”. Modelar la calma y aislar a los niños del conflicto es importante durante este tiempo. Del mismo modo, trata de mantener la mayor normalidad posible en la vida en el hogar y las actividades extracurriculares. Cuando sea necesario realizar cambios, crea nuevas rutinas y trata de apegarte a ellas.
Muestra respeto hacia tu ex: No es saludable que los niños tengan conflictos innecesarios en sus relaciones con sus padres, así que haz lo posible por no hablar negativamente sobre tu ex cerca de tu hijo. “Alguien puede ser un pésimo cónyuge y un buen padre —señala la Dra. Howard— y en realidad no quieres privar a tu hijo de un buen padre. A los niños les va mejor con dos padres amorosos, ya sea que estén divorciados o casados”.
A veces, el conflicto puede surgir una vez que comiencen a resolver cómo ser copadres. Es posible que deban hacer compromisos o turnarse al tomar decisiones. Hagan lo que hagan, traten de presentar un frente unido a su hijo tanto como sea posible. Si tu ex realmente no quiere cooperar, haz todo lo posible por establecer rutinas y expectativas para tu hogar, que es donde tienes control.
Obtén apoyo: Habla con el consejero o maestro de la escuela de tu hijo para averiguar si hay algún servicio disponible en la escuela. Muchas escuelas tienen programas para niños que están pasando por un divorcio, como Banana Splits (en inglés), que es un grupo de apoyo para niños en caso de divorcio de sus padres.
Y si a ti te está costando, asegúrate de obtener apoyo también. Habla con tus amigos y familiares si la situación te resulta agobiante y pide favores si los necesitas. Las personas a menudo quieren ayudar, pero no saben qué hacer, así que diles si necesitas ayuda con la compra o simplemente quieres desahogarte. Si crees que te podrías beneficiar de una terapia, no dudes en programar una cita. Recuerda, puedes apoyar mejor a tu hijo si también recibes el apoyo que necesitas.
Preguntas frecuentes
Algunos consejos para ayudar a los niños a sobrellevar el divorcio incluyen seguir una rutina estructurada. Una rutina puede aliviar la ansiedad, evitar problemas de comportamiento y ayudar a los niños a concentrarse en la escuela. Informa a los maestros de lo que ocurre. Y si un niño parece evitar a sus amistades o la escuela, intenta dedicarle más tiempo.
Hay algunas reglas generales para que los padres ayuden a sus hijos a superar el divorcio. Intenta mantener la calma lo más que te sea posible. Esto les da seguridad a los niños. Diles que el divorcio no es por su culpa. Haz lo posible por no decir nada malo de tu ex cónyuge delante de los niños.