¿Qué es el trastorno de conducta?
El trastorno de conducta es una condición de salud mental que puede afectar a niños y adolescentes. A los niños que tienen un trastorno de conducta parecen disfrutar hacerle daño a la gente y hacer cosas perjudiciales. Son poco amables y a menudo violentos, y no les importan los sentimientos de los demás. Este comportamiento va más allá de las burlas, el acoso o el mal comportamiento normal.
El acoso extremo, hacerles daño a los animales y mentir sin motivo son signos de trastorno de conducta. En los niños más pequeños, el trastorno de conducta comienza con empujones, golpes y mordiscos. En los niños mayores, el trastorno de la conducta puede presentarse con un comportamiento violento más extremo y con delitos como robar, destruir cosas y provocar incendios.
Todos los niños se comportan de forma inapropiada de vez en cuando, así que el trastorno de conducta sólo se diagnostica cuando este comportamiento extremo aparece durante un largo periodo de tiempo y no está causado por el ambiente del niño.
¿Cuáles son los síntomas del trastorno de conducta?
Las señales del trastorno de conducta incluyen:
- No preocuparse por las reglas sociales de buen comportamiento
- Ignorar los derechos y sentimientos de otras personas
- Disfrutar cuando causa daño, cuando miente o manipular a la gente
- Cometer violencia física o sexual
- Hacer daño a los animales
- En los niños más pequeños: mentir sin motivo real, robar por diversión y el acoso extremo
- En los niños mayores: engancharse en peleas, mentir, engañar, robar, destruir la propiedad y abusar física o emocionalmente de los demás
¿Cómo se diagnostica el trastorno de conducta?
El trastorno de conducta es diferente del simple mal comportamiento, que la mayoría de los niños tienen en algún momento. Los niños deben mostrar síntomas de trastorno de conducta durante varios meses seguidos para ser diagnosticados. Antes de diagnosticar a un niño con trastorno de conducta, un profesional también intentará averiguar si su comportamiento extremo podría ser una reacción provocada por problemas en casa. Para ser diagnosticado, el placer del niño por causar dolor debe parecer que proviene de algo interno.
¿Cuáles son los factores de riesgo del trastorno de conducta?
Hay varias cosas que ponen a los niños en mayor riesgo de desarrollar un trastorno de conducta:
- Tener un padre o un hermano con trastorno de conducta
- Tener un padre biológico que abuse del alcohol o tenga depresión, TDAH, trastorno bipolar o esquizofrenia
- Experimentar abusos o negligencia
- Ser acosado o tener amigos que fomentan un comportamiento negativo
¿Cómo se trata el trastorno de conducta?
El trastorno de conducta es difícil de tratar, pero el tratamiento puede funcionar si la familia, los amigos y los maestros del niño se involucran. El tratamiento funciona mejor si comienza cuando el niño es pequeño.
En la terapia para el trastorno de conducta, el niño aprende maneras más sanas de interactuar con los demás. Al mismo tiempo, la familia y el sistema de apoyo del niño aprenden formas de comunicarse con él. Los niños con trastorno de conducta suelen permanecer en psicoterapia o terapia conductual por mucho tiempo.
En los niños más pequeños, la terapia para el trastorno de conducta suele consistir en enseñar a los padres a fomentar el buen comportamiento. En los adolescentes, la terapia también puede centrarse en las relaciones del niño con sus amigos, con otros niños y con los adultos de la escuela (como maestros y directores).
No existe ninguna medicación específica para el trastorno de conducta. Pero los niños con trastorno de conducta a veces también tienen otros trastornos, como la depresión o el trastorno bipolar. Tratar esos otros trastornos con medicación puede ayudar a que la terapia para el trastorno de conducta funcione mejor.