Los niños pequeños alcanzan los hitos del desarrollo a su propio ritmo, y cada niño es diferente. Sin embargo, si le preocupa el desarrollo de su hijo, es importante que hable con el pediatra. La intervención temprana puede hacer una gran diferencia.
Durante los primeros años de vida (de 1 a 3 años), el cerebro, el cuerpo y las habilidades de los niños se desarrollan rápidamente. Para los padres, este periodo es emocionante, desafiante y generalmente un poco abrumador.
Los problemas de comportamiento, como los berrinches y las crisis, los caprichos a la hora de comer, la dificultad para dormir y para aprender a compartir, son habituales durante la primera infancia.
Los niños pequeños alcanzan los hitos del desarrollo a su propio ritmo, y cada niño es diferente. Sin embargo, si le preocupa el desarrollo de su hijo, es importante que hable con el pediatra. La intervención temprana puede hacer una gran diferencia.
Durante los primeros años de vida (de 1 a 3 años), el cerebro, el cuerpo y las habilidades de los niños se desarrollan rápidamente. Para los padres, este periodo es emocionante, desafiante y generalmente un poco abrumador.
Los problemas de comportamiento, como los berrinches y las crisis, los caprichos a la hora de comer, la dificultad para dormir y para aprender a compartir, son habituales durante la primera infancia.
Los niños pequeños alcanzan los hitos del desarrollo a su propio ritmo, y cada niño es diferente. Sin embargo, si le preocupa el desarrollo de su hijo, es importante que hable con el pediatra. La intervención temprana puede hacer una gran diferencia.