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Qué hacer si te preocupa el suicidio

Una guía para padres sobre cómo ayudar a un hijo en peligro.

Escrito por: Nadine Kaslow, PhD

Experto clínico: Nadine Kaslow, PhD

in English

Importante:
Si tú o alguien que conoces necesita ayuda ahora, llama al 988 o visite la Línea de prevención del suicidio y crisis.

¿Qué hacer cuando te preocupa que un niño pudiera estar pensando en suicidarse? Antes que nada, es importante hablar con el niño acerca de sus preocupaciones de una manera calmada y no acusatoria. A veces, cuando los padres sienten demasiada preocupación, terminan diciendo cosas como “no pienses de esta manera” o “no deberías sentirte así”. Además, es posible que no demuestren su afecto y cariño tanto como quisieran, y en su lugar se comporten de una manera crítica. Los niños responden negativamente a eso. Por lo tanto, al hablar con tu hijo, procura mantener la calma y hacer la menor cantidad posible de comentarios críticos.

Demuestra tu amor

Tal vez sea evidente para ti que amas a tus hijos, y que es claro para ellos que tú los amas. Pero cuando los niños están pasando por un momento difícil, necesitan escuchar una y otra vez cuánto los quieres y cuánto te preocupas por ellos. No es suficiente con decirles: “Sabes que te amo”. Necesitas transmitirlo a través de demostraciones grandes y pequeñas. Todos tenemos tantas cosas con las que lidiamos de forma cotidiana que los niños podrían no tener tan claro el lugar que ocupan en tu vida ni si en realidad tienes tiempo para ellos. Hazles saber cuán importantes son para ti.

Expresa empatía

También es importante validar los sentimientos de los niños. Podrías hacer comentarios para demostrar tu empatía: “Parece que eso fue realmente difícil”. “Sé lo doloroso que puede ser”. “Sé cómo se siente, yo también me he sentido así”. Decirles que no se sientan de esa manera o “que lo superen” no es tan útil como decir: “¿Qué es lo que te preocupa, y cómo te puedo ayudar?”. Cuando te preocupa un hijo, es importante buscar ayuda profesional y expresarle de forma explícita que buscar ayuda no es un signo de debilidad, sino algo por lo cual tú le respetarás, y que además le ayudará a lograrlo.

Prioriza lo positivo

Otra manera importante de prevenir la conducta suicida es priorizar las interacciones con tus hijos de una manera positiva. Algunas veces entramos en una especie de círculo vicioso con nuestros hijos. Ellos hacen algo preocupante, los padres nos comportamos de forma crítica, ellos hacen algo más preocupante y los padres nos molestamos más. Todas las interacciones se tornan polémicas. Interactuar de forma positiva significa hacer cosas divertidas, pasar tiempo juntos y hablar sobre cosas que no sean controvertidas ni difíciles.

Minimiza el conflicto

Por lo tanto, elige tus batallas con tus hijos de manera inteligente. Es parte del desarrollo normal que los adolescentes se rebelen. Necesitas elegir dónde pondrás límites y el resto del tiempo debes enfocarte en conexiones positivas. También ayuda intentar aumentar la participación de tus hijos en experiencias positivas. Los niños que participan en muchas actividades divertidas o interesantes tienden a salir adelante. Tu meta como padre o madre es asegurarles a los niños que están teniendo problemas que no se sentirán de esta manera para siempre, y tú puedes ayudar a que lo logren al promover experiencias positivas. Cuando los niños piensan en el suicidio, generalmente es porque sienten desesperanza y no imaginan que las cosas puedan mejorar.

Manténte alerta

También es muy importante prestar atención al paradero de tus hijos cuando no están contigo, ya sea en Internet o fuera de casa. No puedes evitar que tus hijos envíen mensajes de texto, entren en Instagram y Twitter. Hoy en día, es una forma de interacción social normal. Por lo tanto, tú deberías estar en Instagram, aprender a usar Twitter y aprender a enviar mensajes de texto. Y usar esos medios para mantenerte al tanto de lo que están haciendo tus hijos.

Conoce a las amistades de tus hijos

En el mundo “real” es crucial conocer a las amistades de tus hijos para tener una buena idea de quiénes son y establecer un vínculo con ellos. A veces esto se hace más difícil a medida que tus hijos van creciendo, pero es realmente importante hacerlo. También deberías conocer a los padres de sus amistades e intentar mantener la comunicación abierta con ellos. Y también querrás estar en contacto regular con la escuela de tus hijos para garantizar su seguridad y cuidado. No dudes en utilizar a la escuela y al personal escolar como tus aliados en el cuidado de tus hijos cuando sientas preocupación.

Habla abiertamente

Una vez más, el primer paso crucial: si crees que tu hijo o hija pudieran tener intenciones suicidas, aborda el tema y pregúntales acerca de sus pensamientos suicidas. A veces, las personas temen que hablar de este tema pueda convertir en realidad los pensamientos suicidas y aumentar la probabilidad de suicidio. Pero lo cierto es que si los niños sienten que tiene a alguien de la familia con quien pueden hablar, se sentirán mejor. Sentirán que les comprenden. Sentirán que les tratan con empatía. Y eso te da a ti una oportunidad para explicar el valor de la psicoterapia, y posiblemente de la medicación, para manejar las emociones que les están causando tanto dolor.

Encuentra un profesional adecuado

Le puedes pedir al médico de tus hijos o al psicólogo de la escuela que te refiera con un profesional de la salud mental. Recomiendo que busques a un profesional de la salud mental que tenga experiencia específica con adolescentes con conductas suicidas. No a todos los profesionales les acomoda tratar a niños suicidas y no todos tienen la experiencia necesaria. Además, después de entrevistar algunas opciones de terapeutas es importante que elijas a alguien con quien tú y tu hijo o hija se sientan a gusto. Así que si tus hijos te dicen “simplemente no logro conectar con esa persona, no me da confianza“, debes tomar eso en serio. Por supuesto, si pasa lo mismo con una segunda persona y luego con una tercera, en algún punto tendrás que decir: “Bueno, de estas tres personas, ¿con quién te sentiste mejor?”.

Participa en la terapia

Una vez que hayas encontrado a la persona indicada, involúcrate activamente en la terapia. Es necesario que colabores con la terapia de tus hijos. Mientras más sientan los niños que realmente les importan a sus padres, mejor será el resultado. Y eso no solo se refiere a uno de los padres. Cuando alguien en la familia tiene ideas suicidas, se trata de un asunto familiar, y todos tienen que ayudar y participar.

Hay varios tipos de terapia que según las investigaciones han resultado particularmente útiles para niños con intenciones suicidas. Una de ellas es la terapia cognitivo-conductual, que ayuda a cambiar los pensamientos de los niños, lo que a su vez hace que sus sentimientos y acciones cambien. Otro enfoque es la terapia dialéctico-conductual, la cual se basa más en la atención plena (mindfulness). Sabemos que este enfoque ayuda a niños con conductas suicidas, particularmente quienes tienen lo que se llama trastorno límite de la personalidad y muchos pensamientos suicidas. Finalmente, en el caso de niños que están experimentando una depresión o ansiedad extremas, o que tienen TDAH, podrían ser útiles los medicamentos en combinación con la psicoterapia.

Toma medidas de emergencia

Por supuesto que si a ti te preocupa que, de no actuar de manera inmediata, tu hijo o hija intentará suicidarse, debes llamar al 911, o a cualquier número de emergencia para acceder a servicios de salud mental en tu comunidad, o ir directamente al hospital. Los pensamientos o comportamientos suicidas son una emergencia, y se tienen que abordar como tal.

Para obtener más información y recursos sobre el suicidio, ve la página de ayuda de APA (en inglés).

Importante:
Si tú o alguien que conoces necesita ayuda ahora, llama al 988 a la Línea de prevención de suicidio y crisis.

La última revisión de este artículo se realizó en 11 de septiembre de 2025.

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